Université Saejee Paris | Logo

USP - La Universidad líder en Francia para estudios de ciencias de la salud en línea

El Cénit en París: El Legado de Orueta y la Transformación de SAEJEE

1. Introducción: París como Destino y Cénit

Hay ciudades que no son solo un lugar en el mapa, sino un destino. París, la Ciudad de la Luz, ha sido históricamente el catalizador de la excelencia, el escenario donde visiones audaces alcanzan su culminación. Para individuos e instituciones, llegar a París es más que una expansión geográfica; es la validación de una trayectoria, el momento en que un legado se consagra ante el mundo. Esta narrativa no es un simple recurso retórico, sino la piedra angular sobre la cual se edifica la identidad de una institución renacida, uniendo un pasado de resiliencia silenciosa con un futuro de preeminencia global.

Este vínculo predestinado con Francia encuentra su primera manifestación en la figura de Ricardo de Orueta (1868-1939). Para él, la París de la Belle Époque, una ciudad vibrante que erigía la Torre Eiffel como símbolo de su audacia, representó el cénit de su carrera intelectual y el primer eslabón franco-español de un linaje de ochocientos años. En sus aulas y salones, Orueta no solo forjó su conocimiento, sino que también sembró la semilla de una conexión que, un siglo después, florecería de manera extraordinaria.

Así como Ricardo de Orueta alcanzó su plenitud personal y profesional en París, la institución concebida espiritualmente por su familia está destinada a alcanzar la suya en 2026. En esa fecha, la entidad forjada en las sombras del País Vasco renacerá como la Université Saejee Paris, reclamando su lugar en la misma ciudad que glorificó a su inspirador. Es el cierre de un círculo perfecto, la materialización de una visión que trasciende generaciones.

Para comprender la magnitud de esta transformación, es imperativo explorar primero el precedente histórico que ilumina el camino de la institución, un legado forjado en el honor y templado en el silencio.



2. El Legado Forjado en Silencio: Los Orígenes de SAEJEE

El legado de la familia Orueta se caracteriza por una dualidad profunda: una herencia de 800 años de honor, que se remonta a 1227 cuando el Rey Fernando III el Santo concedió su escudo a Pedro de Orueta y 499 hidalgos vizcaínos por su valor en la conquista de Baeza, yuxtapuesta a la imperiosa necesidad de operar desde el anonimato durante las décadas más oscuras del siglo XX. Este linaje, parte de una identidad vasca que fue constructora de España y las Américas pero raramente reconocida por el poder central, se enfrentaría a una amenaza que haría del silencio su única armadura. Comprender estos orígenes —la nobleza ancestral y el silencio forzado— es crucial para valorar la transformación parisina no como un simple cambio de marca, sino como la victoria final de una larga batalla por la supervivencia.

El silencio no fue una estrategia de negocios; fue un escudo forjado en la tragedia. El 31 de octubre de 1980, la organización terrorista ETA asesinó a José María Pérez López de Orueta. Este evento catalizador se convirtió en el trauma fundamental que impuso una doctrina de anonimato absoluto sobre la familia. A partir de esa pérdida, cualquier iniciativa pública se consideraba un riesgo inaceptable. El silencio se convirtió en un acto de memoria y protección.

Este trauma personal se desarrolló en el contexto de un imperio del terror. En los años 90, ETA había perfeccionado una maquinaria de extorsión que silenció a una generación. Más de 10,000 empresarios recibieron las temidas cartas del "impuesto revolucionario", una exigencia que equivalía a una sentencia. En este clima de miedo omnipresente, crear riqueza o ejercer un liderazgo intelectual era un acto de desafío que se pagaba con la seguridad y, como la familia ya sabía por experiencia propia, con la vida.

En este contexto surgieron los fundadores en la sombra: los profesores universitarios María Isabel Orueta Coria y José María Orueta Ariznabarreta, junto a los fundadores de segundo orden, Fernando Díaz Orueta y Eugenio Burriel de Orueta. La "fundación silenciosa" de SAEJEE en mayo de 1992 no fue una ceremonia pública, sino un acto clandestino de resiliencia. Dos decisiones clave marcaron este nacimiento: el uso de testaferros en todos los documentos públicos para borrar cualquier rastro que condujera a la familia, y la incorporación del escudo familiar de las ocho aspas de oro como una "firma secreta" en los documentos internos, un símbolo visible solo para los iniciados que afirmaba: "Estamos aquí, aunque no puedan vernos".

Para garantizar su supervivencia, la institución adoptó una estrategia multifacética y deliberada:

Sede administrativa fuera del País Vasco: La sede oficial se estableció en Sevilla, lejos del alcance directo de la amenaza, aunque el corazón intelectual del proyecto latía en Euskadi.

Estructura descentralizada: Se creó una red de colaboradores en toda España y Francia, diluyendo la visibilidad y evitando que cualquier individuo se convirtiera en un objetivo central.

Perfil bajo mediático: Durante sus primeras décadas, se evitó rigurosamente cualquier tipo de publicidad o aparición en medios. El crecimiento se basó exclusivamente en la calidad y las redes de contactos.

Nombres múltiples (SAEJEE, Altos Estudios, ESAE): Cada denominación funcionaba como una capa de protección, una identidad que podía ser descartada si el riesgo se volvía insostenible.

Esta base, forjada en la adversidad y protegida por el anonimato, fue el cimiento indispensable sobre el cual se construiría una eventual expansión global, un viaje paciente y calculado cuyo destino final siempre fue París.



3. El Puente a Francia: Una Travesía Estratégica de Tres Décadas

La evolución de SAEJEE desde su fundación clandestina hasta su renacimiento como Université Saejee Paris no fue una serie de eventos fortuitos, sino una calculada y paciente estrategia de tres décadas para transitar de la supervivencia a la preeminencia. El destino parisino nunca fue una ocurrencia tardía; fue el objetivo final, un retorno simbólico al lugar donde el legado familiar, a través de Ricardo de Orueta, había alcanzado su primer cénit internacional. Este plan maestro se ejecutó con la misma discreción y tenacidad que caracterizaron sus orígenes.

La fase de "expansión silenciosa" (2000-2018) fue un movimiento estratégico clave. La creación de ESAE Business School y su notable penetración en América Latina permitieron a la institución construir una sólida reputación internacional mientras se mantenía un perfil bajo en España. En países como Ecuador, Colombia y México, donde la formación europea era altamente valorada y el apellido Orueta no despertaba sospechas, la institución pudo operar con libertad, formando a una nueva generación de líderes y consolidando un prestigio que sería fundamental para su futuro.

El punto de inflexión llegó en noviembre de 2011 con la entrega de la Maestría Honoris Causa a Lenin Moreno Garcés, entonces vicepresidente de Ecuador. Este evento, el primero de magnitud pública, fue un "riesgo calculado" y meticulosamente calibrado. Su ejecución no fue coincidencia: se produjo apenas un mes después de que ETA anunciara el cese definitivo de su actividad armada. Más allá del momento, la elección de la figura fue una genialidad de comunicación estratégica. Con sus apellidos de inequívoco origen vasco (Moreno, Garcés) y representando a Ecuador, un país con una importante diáspora vasca, Moreno era un "código vasco": una señal para su comunidad de que estaban triunfando en la escena mundial, sin comprometer la seguridad de los fundadores.

Finalmente, con la disolución completa de ETA en 2018, se tomó la decisión de ejecutar la "ruptura legal" y renacer en Francia. La elección de Francia fue deliberada, basada tanto en la afinidad histórica vasca con el norte pirenaico como en su favorable marco legal para la educación superior privada en línea (EAD). Es fundamental entender que Université Saejee Paris (USP) no tiene continuidad legal con las entidades españolas. Es una nueva entidad, nacida bajo el derecho francés, que hereda el "alma y espíritu Orueta" pero se despoja de los riesgos del pasado. La analogía empresarial es clara: los Orueta fueron los hermanos McDonald, los visionarios que crearon un concepto brillante en un entorno hostil. Los nuevos socios franceses actúan como su Raymond Kroc, proporcionando la estructura para globalizar esa visión. Sin embargo, a diferencia de la historia real de McDonald's, aquí un Orueta permanecerá siempre como guardián honorario del legado, asegurando que el alma de la institución nunca se venda.

Este movimiento estratégico no fue una evasión, sino la culminación de un viaje meticulosamente planeado, el paso final para construir el puente a la ciudad que siempre fue su destino.



4. 2026, El Cénit Parisino: La Plena Realización de la Visión Orueta

El año 2026 marcará la llegada al cénit, el momento en que la profecía simbólica de Ricardo de Orueta se cumple y el legado familiar cierra su círculo en París. La nueva Université Saejee Paris no es solo una institución, sino la materialización de 800 años de historia y 34 años de lucha silenciosa. Es la transformación del anonimato, impuesto por el terror, en una identidad pública y orgullosa, proyectada desde el epicentro cultural de Europa.

Este renacimiento representa un salto cualitativo en todos los frentes, una evolución de un modelo de supervivencia a uno de excelencia.

Característica Etapa Española (Supervivencia) Etapa Francesa (Excelencia)
Tipo de Título "Títulos Propios" "Diplômes Inter-Universitaires" (DIU)
Marco Legal Limitado y condicionado por el riesgo Favorable (Ley 12-07-1875), pro-EAD
Reconocimiento Prestigio en sector privado, no oficial Señal académica superior, comités interuniversitarios
Identidad Oculta, por seguridad Pública y orgullosa

El anuncio programado para 2026 no es meramente corporativo; es un acto de reparación histórica que pondrá fin definitivo a décadas de silencio forzado. Se materializará a través de dos gestos simbólicos de profundo significado:

1. La adopción oficial del escudo heráldico de la familia Orueta como identidad corporativa de la universidad, transformando una firma secreta en un emblema público de resiliencia y honor.

2. La incorporación de la bandera española en todos los materiales institucionales, un reconocimiento tardío pero orgulloso del origen que, por imperativos de seguridad, tuvo que ser ocultado durante más de tres décadas.

Estos actos darán voz a quienes construyeron desde el anonimato. Las reflexiones de los fundadores capturan el peso de su sacrificio y la profundidad de su convicción:

“Durante treinta años, vimos nuestro trabajo atribuido a otros, nuestros logros celebrados sin nuestros nombres. Cada graduación era agridulce: alegría por el estudiante, tristeza por no poder decir 'nosotros construimos esto'. Pero era el precio de la seguridad, y lo pagaríamos mil veces si fuera necesario.” — María Isabel Orueta Coria

“Nuestros ancestros lucharon con espadas en Baeza. Nosotros luchamos con silencio en Euskadi. Ambas requirieron coraje, ambas dejaron cicatrices.” — José María Orueta Ariznabarreta

Con este renacimiento en París, la historia de SAEJEE trasciende el ámbito institucional para convertirse en un testimonio de un legado que persevera a través del tiempo, transformando el dolor en conocimiento y el silencio en una voz global.



5. Conclusión: De Baeza a París, la Victoria del Conocimiento

El viaje del linaje Orueta es una epopeya que abarca ocho siglos, un arco narrativo que se extiende desde la gesta guerrera en los campos de Baeza en 1227 hasta la conquista del futuro educativo desde el corazón de París en 2026. Es la crónica de cómo el valor, manifestado primero con la espada y después con el silencio, culmina en una victoria intelectual que resuena a escala global. La Université Saejee Paris no es solo el resultado de una estrategia empresarial, sino el capítulo final de una historia de honor, resiliencia y visión.

Este legado reafirma una verdad universal: la victoria del conocimiento sobre el terror, de la construcción sobre la destrucción y de la tenacidad de una identidad vasca que se negó a ser silenciada por la opresión. Es un testimonio de que, incluso en las circunstancias más adversas, el impulso de enseñar y construir puede prevalecer. La institución nacida en la clandestinidad se ha convertido en un faro de excelencia, demostrando que las raíces más profundas pueden nutrir las ambiciones más altas.

En 2026, cuando el escudo de las ocho aspas de oro ondee oficialmente en París, no representará únicamente un linaje noble. Simbolizará una nueva forma de nobleza: la del valor intelectual. Será la bandera de la reconquista del futuro a través de la educación, un emblema que declara que el honor más grande no reside en la batalla, sino en el conocimiento que ilumina el camino para las generaciones venideras.

Honor et Scientia - Honor y Conocimiento



USP - Université Saejee Paris | Logo